El 19 de julio de 2011, después de 6 meses (empezó el 19 de enero) llegó a su fin el primer juicio contra la Conspiración de Células del Fuego, el de llamado “caso de Halandri”. Compuesto por tres jueces Tribunal de Delitos Graves de Atenas declaró las condenas (se trata de las llamadas condenas combinadas, puesto que por ejemplo la suma total de condenas por los delitos de cuales fueron declarados culpables Hadzimihelakis y Argyrou es 77 años, etc.):
Haris Hadzimihelakis fue declarado culpable de: formación y pertenencia a organización terrorista, perpetración ética en explosiones realizadas en casa en ex-ministro Hinofotis, parlamentaria de PASOK Katseli y en Ministerio de Macedonia y Tracia, fabricación y posesión de 3 artefactos explosivos (pues, los utilizados en estos ataques). Condenado a 37 años y 4 meses de cárcel (lo que significa que tiene que cumplir 25 años).
Panagiotis Argyrou fue declarado culpable de: formación y pertenencia a organización terrorista, perpetración ética en explosiones realizadas en casa en ex-ministro Hinofotis, parlamentaria de PASOK Katseli y en Ministerio de Macedonia y Tracia, fabricación y posesión de 3 artefactos explosivos (pues, los utilizados en estos ataques). Condenado a 37 años de cárcel (lo que significa que tiene que cumplir 25 años).
Giorgos Karagiannidis fue declarado culpable de: pertenencia a organización terrorista, simple complicidad en causar explosión en casa de Katseli, fabricación y posesión del artefacto explosivo utilizado en ataque contra la casa de Hinofotis. Condenado a 20 años de cárcel.
Panagiotis Masouras fue declarado culpable de: pertenencia a organización terrorista, simple complicidad en causar explosión en casa de Katseli, fabricación y posesión del artefacto explosivo utilizado en ataque contra la casa de Hinofotis. Condenado a 11 años y 6 meses de cárcel.
Konstantina Karakatsani fue declarada culpable de: pertenencia a organización terrorista, simple complicidad en causar explosión en casa de Katseli, fabricación y posesión del artefacto explosivo utilizado en ataque contra la casa de Hinofotis. Condenada a 11 años de cárcel.
Aleksandros Mitrousias fue declarado culpable de: pertenencia a organización terrorista, simple complicidad en causar explosión en casa de Katseli, fabricación y posesión del artefacto explosivo utilizado en ataque contra la casa de Hinofotis. Condenado a 11 años de cárcel.
Emmanuel Giospas fue declarado culpable de hurto (un sello del hospital), falsificación (un carné de estudiante) y robo (un cuaderno de multas de Guardia Urbana). Se trata de las cosas que no tienen que ver con acusaciones relacionadas a CCF, simplemente esos fueron objetos encontrados en su casa. Condenado a 2 años y 9 meses de cárcel con suspensión (3 años).
Nikos Vogiatzakis y Errikos Rallis fueron absueltos.
Las condenas son todavía más duras que las que propuso el fiscal. Especialmente cuando consideramos que según la sentencia los perpetradores físicos de los 3 ataques explosivos en cuestión permanecen desconocidos y lxs compañerxs fuerxn condenadxs sólo por ser “perpetradores éticos”. En caso de Masouras, Karakatsani, Mitrousias y Giospas el tribunal había reconocido una circunstancia atenuante, la de “edad pos-adolescente”, puesto que ninguno de lxs 4 al cometer dichos “crímenes” había cumplido 21 años. En caso de Giospas fue reconocida también la circunstancia atenuante de “buena conducta” (durante 6 meses de su encarcelamiento no publicó ninguna carta, etc.) Se trata de las primeras condenas a base de la llamada “ley antiterrorista 2”, la cual lxs jueces utilizaron plenamente.
Lxs abogadxs de defensa inmediatamente formularon una petición de suspender las condenas de Masouras y Karakatsani. El abogado de Mitrousias preguntó a su cliente si quiere intentarlo también pero éste se negó. De todos modos la petición fue rechazada por unanimidad, a pesar de que el fiscal propuso aceptarla. Esto significa que Nina Karakatsani permanecerá encarcelada y nuestro querido “Takis” Masouras que últimos meses estaba con nosotrxs, fue esposado y llevado dentro por la puerta opuesta a ésa por cual entró la sala ese día…
Después de que condenas fueron dictadas, entre gritos y consignas, los padres de Konstantina intentaron abrazarla, policías no lo permitieron empujando a la madre de Nina hasta que cayó en el suelo, se metieron otrxs compañerxs y familiares ( algunas 50 personas), entró una unidad de antidisturbios y se realizó una breve pelea hasta que los maderos lograron desalojar la sala.
Es muy probable que se van a realizar algunos traslados de lxs compañerxs, dentro de poco publicaremos un actualizado listado de presxs anarquistas en Grecia.
Nada queda igual, nada acabó, todo sigue…