Sergio Catrilao y Pablo Canío estaban recluidos en la cárcel de Temuco por haber participado en un atentado a un autobús en el año 2009.
“Nosotros no hemos reconocido nada y vamos a seguir en la huelga hasta el final”, esas fueron las primeras palabras de los dos comuneros mapuches que lograron su libertad provisoria previo pago de una causión de un millón de pesos cada uno.
Fue la jueza de garantía de Temuco, Luz Mónica Arancibia, quien decretó la libertad de Sergio Catrilao y Pablo Canío, que permanecían en huelga de hambre en el penal de esta ciudad, imputados por haber participado en un atentado a un autobús en Temuco en el año 2009.
Los comuneros insistieron que la postura de ellos, al igual que la de los otros mapuches, es mantener el ayuno hasta que se levante la aplicación de la ley antiterrorista y se ponga fin a la doble judicialización de sus causas.
A su vez, esta mañana oficializó el inicio de su huelga de hambre el comunero preso en Angol Carlos Huaiquillán Palacios (22) quien tiene una causa por delito común tras el atentado que quemó un camión aljibe en 2009 en la zona rural de Collipulli.
La demanda de este comunero pasa porque sea trasladado a un módulo donde estén los demás presos mapuches, ya que hasta ahora permanece recluido en un pabellón común al resto de la población penal.
fuente: prensa chilena, 14.09.10